El jardín del Instituto Obras comenzó con las clases de yoga de la mano de la profesora Soledad Calleja. Una actividad que logra la armonía y salud mental en los más pequeños.
Las técnicas de yoga en el jardín de infantes facilitan una base sólida para la buena salud física, mental y emocional; el crecimiento, la concentración, la no violencia y el éxito tanto en la educación como en la vida. Por eso, en el Instituto Obras el ciclo inicial cuenta con dicha actividad a partir de este año.
Las técnicas de yoga en el jardín de infantes están pensadas en función de la edad del niño y de la unidad de sus intereses, para favorecer el desarrollo de su personalidad.
El ofrecer una variedad de estímulos motrices posibilita en el niño de edad temprana, logros significativos que aparecerán en su vida escolar y en el trayecto evolutivo de su vida, garantizando el éxito.
Los primeros años en la vida de los seres humanos no sólo tienen una importancia fundamental para su crecimiento y el desarrollo de sus capacidades cognitivas, comunicativas y sociales, sino que se convierten también en el pilar fundamental para el desarrollo posterior.
En la vida del niño, su sistema nervioso presenta una gran plasticidad y por tanto, recibe y asimila con mayor facilidad todas las experiencias, pudiendo establecer nuevas conexiones neuronales y en mayor número que en edades posteriores.
De manera que nos ofrecen una oportunidad única durante la cual podemos proporcionar al niño los pilares básicos de su aprendizaje.
Promover el lenguaje gestual a través de juegos de imitación como representar animales o personajes de un cuento permiten no solo desarrollar el lenguaje comprensivo y expresivo sino también promueven la iniciativa, la desinhibición, el ingenio y la imaginación.
Las técnicas de yoga en el jardín de infantes están pensadas en función de la edad del niño y de la unidad de sus intereses, para favorecer el desarrollo de su personalidad.
OBJETIVOS:
– Aumentar su capacidad de concentración y relajación
– Vivenciar y conocer su propio cuerpo.
– Lograr descargar su impulsividad sin culpabilidad.
– Reafirmar su autoestima.
– Sentir seguridad emocional.
– Orientar la energía en forma positiva.
– Aprender a cuidar nuestro medio ambiente.
– Participar en forma respetuosa, solidaria y cooperativa en las actividades.
– Mejorar la flexibilidad y elongación.
– Coordinar movimientos.
– Canalizar las emociones.
-Estimular la concentración y reducir el nivel de tensión y mejorar la convivencia con su entorno.
– Reavivar los valores tales como la verdad, el amor, paz y no violencia.
FOTOGRAFÍA: Celeste Palavecino David para prensa Obras