Los chicos de quinto año del Instituto Obras disfrutaron de un momento único en la vida del estudiante: el final de la secundaria. Las emociones son muchas, porque se trata de cerrar una etapa marcada por la amistad y el aprendizaje para luego abrirse a buscar nuevos horizontes. Cada uno recibió su diploma y medalla de reconocimiento ante la mirada de los familiares que se acercaron al estadio del club.

Hay que destacar que cuatro de los egresados se desempeñan también como reclutados en las inferiores de Obras Basket: Nerea De La Cruz, Luca Valussi, Lautaro Berra y Francisco Barbotti.

Les presentamos las palabras que la directora del área Marcela Tognola dirigió a todos ellos: “La vida sólo puede comprenderse mirando hacia atrás, pero hay que vivirla mirando hacia delante. Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida. Detrás de cada logro, hay otro desafío. Pero por sobre todas las cosas no tengan miedo ante esa puerta que hoy tienen ante ustedes, esa puerta que, en definitiva, se presenta en cualquier momento. Solo hay que estar atentos para saber abrirla en el instante preciso. Sean leales a ustedes mismos. Detrás de cada uno de ustedes hay seres queridos que los han apoyado y, en algunos casos, empujado para que ustedes hoy vivan este momento. Por eso quiero pedirles a los egresados que se pongan de pie y, mirando a quienes hoy los acompañan, les digan gracias con un fuerte aplauso. Y, como último trabajo práctico, el más difícil de todos, les dejamos el deber de construir su propio futuro. Traten de recorrerlo con equilibrio. La vida no es una carrera, sino un viaje que debe ser disfrutado a cada paso. El ayer es historia, el mañana es misterio y el hoy es un regalo, por eso lo llamamos presente. Y, como presente, se llevan un poco de nosotros, de nuestro corazón. Los regalos se retribuyen y ustedes ya forman parte de nuestra propia vida. Ustedes han sido protagonistas de estas situaciones y queremos que se las lleven para siempre”.