Los chicos del pre-escolar del Instituto Obras tuvieron un día especial junto a sus abuelos. La señorita Camila Suarez armó un proyecto llamado juegos y juguetes que participaron todos los integrantes de la familia.
La actividad comenzó desde la casa. Cada chico llevó a su hogar un cuestionario de preguntas para hacerles a sus abuelos, tíos o papas. La idea fue saber a qué juegos jugaban en su épocas y que juguetes tenían. “Una vez que obtuvimos la información, hablamos que cosas conocía y que no y a partir de ahí nos pusimos a trabajar”. Por ejemplo, los chicos jugaron a la Farolera, al cigarrillo 43, a Martín Pecador, actividades que hacían sus abuelos de pequeños y que sus nietos no conocían. De la misma manera sucedió con los juguetes. Jugaron al balero, al trompo, y los chicos no tenían ni idea de que se trataba”, contó Camila.
Por otro lado, en el cuestionario se le pregunto a los abuelitos si confeccionaban sus propios juguetes y todo pusieron que sí. A partir de ahí, y con material descartable que se le pidió a los papas, los chicos vivenciaron lo que es armar sus propios juguetes en las horas de taller y arte. “Fue una actividad muy divertida. Los chicos no están acostumbrados y la pasaron genial. Armaron sus propios baleros, trompos y la bola local”, manifestó la señorita de la sala Sol y Luna.
Una vez terminado todo vino lo más divertido. “Invitamos a todos los abuelos, tíos y papas a que vengan a ver los juguetes armados por sus propios nietos y jugar con ellos. “Fue un momento mágico. Los abuelos estaban encantados de compartir un momento en el jardín junto a sus nietos, y los pequeños felices de ver a sus abuelos en el lugar donde ellos comparten, estudian y se divierten”, dijo Suárez.
“Los abuelos son muy importantes. Siempre deben estar junto a sus nietos porque son un factor fundamental en sus vidas. Nunca deben perder la oportunidad de compartir cosas con los más chicos”, cerró Camila.