Comenzaron las clases tanto en el primario como en el jardín del Instituto Obras. Como en todos los ciclos lectivos hay muchas expectativas y proyectos para que los alumnos crezcan día a día. En un año muy especial ya que el club-colegio cumple 100 años las directoras anticipan las diferentes actividades que vendrán en este 2017.
Karina Pollarolo, directora por segundo año del primario, se mostró muy entusiasmada con todas las tareas que se avecinan: “Sabemos que es un año especial ya que es el centenario del club y los festejos, alegrías y los pensares van a estar encaminados hacia ese objetivo. Luego continuar trabajando con todo el cuerpo docente con proyectos de lectura y la realización de un libro. También seguir enfocados a formar buenas personas que es lo esencial. Por otro lado, reforzar todo lo que se trabaja en las casas y revalorizar a cada uno de los interiores de los seres en los cuales trabajamos».
Una de las novedades que tuvo el primario fueron las clases de relajación. “Desde el año pasado se incorporó para alumnos de primer grado clases de relajación. La idea es que se siga desarrollando dicha actividad y sumar a más grados. Pienso que es una gran propuesta. Estas clases les ayuda a afrontar los días largos que les esperan desde las 8 de la mañana hasta las cuatro de la tarde. Es un momento que cada chico lo toma a su manera y logra que estén concentrados hasta el final de la jornada lectiva”, comentó Pollarolo.
Los primeros días de clases son muy importantes para los alumnos de primer grado. Es todo un mundo nuevo y los chicos tienen altas expectativas y sobre todos nervios “Los ojos de de todo el equipo docentes están puestos para que esos niños pasen sus mejores días y se llevan a sus casas los mejores momentos grabados en su retina. Trabajamos todo en post de acompañarlos. Guiarlos, jugar, aprender, relajar, activar. Está todo pensado para que ellos la pasen bien”, comentó la directora.
Período de adaptación en el jardín.
La directora del jardín, Nancy Romero, habló sobre el período de adaptación que tienen los más pequeños de toda la institución. Para los chicos de dos también es muy emocionante conocer cosas nuevas, amigos, el compartir y aprender.
“El periodo de adaptación es justamente tratar de que los niños se desprendan de la mama y el papa. Descubrir lo lindo que es el jardín. Ellos comienzan con poca carga horaria y de a poco se van adaptando. De todas formas es un momento para crear vínculos, saber que hay una señorita que se va a ocupar de todos y a partir de la semana que viene hacen jornada completa”, manifestó Romero.
Ellos también serán parte fundamental en el festejo del centenario y tienen muchas ideas que irán trabajando en el transcurso del año: “En el jardín siempre festejamos los cumpleaños de la institución, pero en este particular las señoritas están a full porque quieren organizar actividades que van a culminar con una exposición de arte con el antes y el después desde el club mismo, el barrio, las distintas copas y camisetas que fueron teniendo los jugadores a los largo de los años. Vamos a decorar el jardín con todas las cosas lindas que podamos porque para los nenes a esta edad festejar un cumpleaños es lo mejor que hay”, cerró Nancy.